Somos de plástico… cada vez más

planeta_de_plastico¿Sabías que el 95% de las personas ya tienen los componentes químicos del plástico en el organismo? El científico Wallace J. Nichols se ha encargado de darnos un tirón de orejas cuando detectó que este material no solo contamina el medio ambiente, sino que los elementos tóxicos que lo componen también contaminan a todos los seres vivos.

Recuerda los productos que compraste durante tu última visita al supermercado. Ahora intenta recordar solamente aquellos productos cuyo embalaje no contiene plástico en su composición. Difícil, ¿verdad? Casi todos los alimentos que compramos nos llegan a nosotros metidos en un higiénico, práctico y atractivo embalaje de plástico. Después de comprar un producto, su embalaje -que aún se encuentra en perfectas condiciones de uso- va directamente a la basura. Lo que no se recicla de la manera correcta, va de la basura al medio ambiente y del medio ambiente a nuestro organismo.

Existen varios problemas relacionados con esta cuestión:

  • El plástico es un producto barato y versátil, características difíciles de reunir en productos similares, menos contaminantes y capaces de sustituirlo sin perjudicar los intereses de los grandes empresarios.
  • Nos dejamos llevar por las apariencias. Un producto desechable parece mucho más higiénico, así como las frutas, las verduras, las galletas o cualquier otro alimento envasado con plástico.
  • Ya estamos acostumbrados a estar rodeados de plástico por todas partes. Cuando algo se transforma en un hábito, la mayoría de las personas no piensa en las consecuencias que puede tener este hábito.

El proceso de degradación del plástico es extremadamente lento. Mientras que una simple bolsa tarda 150 años en descomponerse, una botella puede tardar hasta mil años para desaparecer de la faz de la Tierra. ¿Estás pensando lo mismo que yo? Claro. Nosotros desapareceremos mucho tiempo antes.

La descomposición de los productos de plástico es lenta y compleja. La Expedición Malaspina, realizada por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), detectó la presencia de partículas de plástico en todos los océanos, lo que significa que nuestros mares se han convertido en una inmensa sopa de polietileno y polipropileno. La secuencia es la siguiente: esos residuos acaban entrando en la cadena trófica; los animales marinos son parte de la alimentación humana. Si somos lo que comemos, entonces somos cada vez más de plástico.

La investigación del CSIC demuestra que nuestro comportamiento está afectando a todos los tipos de vida del planeta y las consecuencias de ello son aún imprevisibles e incalculables. El planeta Tierra está pidiendo ayuda y es necesario informar a la población sobre el alcance de sus propios actos. Los medios tienen un papel fundamental en esta historia, porque facilitar el acceso a este tipo de información es imprescindible para que podamos concienciarnos y cambiar nuestros hábitos.

ave_con_plastico_en_el_estomagoTodos sabemos que los cambios no son fáciles. Cuando vayamos al supermercado, compraremos los mismos productos envueltos en los mismos embalajes de plástico. Pero el simple hecho de que todos seamos conscientes de que esto está perjudicando el futuro de los seres vivos ya es un comienzo.

Cuando vayas a tirar una bolsa, una botella, un vasito de yogur, etc., piensa que si ese material no se recicla, irá a parar al estómago de algún animal indefenso y que ese animal indefenso -si logra sobrevivir después de ingerir tal cantidad de plástico- va a ir a parar a tu estómago. Piensa. Piensa y actúa.